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Claudio Giráldez introdujo varios cambios con respecto al partido ante el Valencia, ya que en Villarreal realizó muchas rotaciones. Entraron Moriba y Borja Iglesias en el once inicial, quedando en el banquillo Damián y Douvikas. Así el once inicial estuvo formado por Iván Villar, que sigue siendo titular, con Javi Rodríguez, Jailson y Carlos Domínguez en el eje de la zaga. En los carriles Hugo Álvarez y Mingueza, aunque ocupando la banda opuesta al último partido en el que coincidieron, con Mingueza por la banda derecha. En el eje de la zaga Beltrán y Moriba, con Swedberg, Iago Aspas y Borja Iglesias más adelantados.
Comenzó el partido con un Osasuna muy reconocible, a pesar del cambio de entrenador. Los rojillos aplicaban una asfixiante presión en la salida de balón que dificultaba la circulación al Celta. Con el paso de los minutos, el Celta logró sacarse de encima la presión y empezó a acercarse al área contraria, llegando en el minuto 10 la primera ocasión tras una combinación de Aspas con Mingueza, que puso el primer centro de la tarde, que en este caso se paseó por el área pequeña sin consecuencias.
En el minuto 21 se adelantó Osasuna tras un saque de esquina, remate de primeras de Rubén García que saca la defensa, pero el balón queda muerto y es aprovechado por Boyomo para batir con facilidad a Villar. El central estaba debutando con su equipo.
El gol dejó un tanto aturdido al Celta, que en los siguientes minutos estuvo a merced de Osasuna. De hecho en el 26 estuvo a punto de marcar por medio de Rubén García, que remató a la media vuelta, pero Villar sacó el balón con el antebrazo evitando el 2-0.
Borja Iglesias había tenido una clara oportunidad tras un centro de Mingueza desde la derecha, pero Herrera sacó el balón con la cara. A la media hora el santiagués no perdonó tras otra espectacular acción de Mingueza, que dentro del área se fue de su par con un caño y puso un balón perfecto para que el “Panda” solo tuviera que poner el balón para empujar el balón al fondo de las mallas poniendo el empate en el marcador.
En los últimos minutos de la primera parte apenas pasaron cosas, pero lo suficiente para que Osasuna se adelantase nuevamente en el marcador casi en tiempo de descuento, tras un centro lateral que buscaba la cabeza de Budimir, el croata rozó el balón que acaba impactando en la cara de Carlos Domínguez para introducir el balón en su propia portería, poniendo el 2-1 con el que se llegaría al descanso.
Tras el receso movió el banquillo Claudio Giráldez con un triple cambio, entrando al terreno de juego Starfelt, Damián y Alfon, y quedando en el vestuario Fran Beltrán Swedberg y Carlos Domínguez. A pesar de los cambios, al Celta le costó voltear el campo hacia la portería de Sergio Herrera, algo que conseguiría a los 10 minutos de la reanudación.
En el 58 llegó la primera gran intervención de Sergio Herrera tras un pase profundo de Hugo Álvarez para Alfon, que gana línea de fondo y envía un disparo que es repelido por el meta osasunista. El propio Alfon tuvo en sus botas el gol del empate tras una acción embarullada en la que el balón cae a pies del albaceteño cuyo disparo se va alto.
Justo cuando parecía que el Celta se había hecho con el control del partido llegó una contra letal conducida por Abel Bretones, que ganó el pico del área para batir a Iván Villar. Cuatro disparos entre los tres palos y tres goles para Osasuna esta tarde.
El gol le sentó muy mal al Celta, que no tuvo capacidad de reacción. Claudio Giráldez introdujo a Douvikas en lugar de Borja Iglesias, y unos minutos más tarde a Hugo Sotelo en lugar de Moriba. Con la entrada del canterano mejoró ligeramente la construcción del juego, pero el equipo vigués apenas generó ocasiones, más allá de lanzamientos a balón parado.
Alfon protagonizó dos acciones claves del partido. La primera forzando una falta al borde del área, que las repeticiones no acaban de dejar claro si es dentro o fuera, aunque el VAR consideró que la decisión de Martínez Munuera era correcta. Hugo Álvarez lanzó la falta encontrando la intervención de Sergio Herrera.
Unos minutos después, Alfon llega tarde a un baló e impacta con los tacos sobre la cara de Areso, siendo expulsado. Con uno menos, el Celta quedó totalmente fuera del partido, aunque Osasuna se pegó un tiro en un pie con un gol absurdo en propia meta, que metió al Celta en el partido en tiempo de descuento, aunque no fue capaz de tan siquiera asustar a los navarros.
Así se llegó al final del encuentro, con la segunda derrota consecutiva de la temporada. El Celta acumula 9 goles en contra, 7 en los dos últimos partidos, en una línea preocupante. Por delante vienen 15 días para trabajar y mejorar de cara al próximo encuentro, con el Real Valladolid como rival en Balaídos.
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