 |
| Foto: Octavio Passos / Getty Images |
El sistema de Claudio Giráldez tiene una posición especialmente delicada en la figura del central libre, el que juega más centrado de los tres de atrás, que en el debut del técnico porriñés ocupó Unai Núñez hasta que fue sustituido en la segunda mitad. El de Sestao no tuvo su mejor día, con varios errores de bulto, uno de ellos costó el tanto del Sevilla, pero no fue el único.
En el partido de este mediodía, Giráldez apostó por Carl Starfelt, que ejerció como esa especie de libre que además lo era también en la presión del Rayo, que se centraba en los centrales más abiertos y le dejaba mucho espacio para el sueco, quizás demasiado, lo que en algunas ocasiones provocó pérdidas que pudieron tener funestas consecuencias para la portería celeste.
El nuevo técnico celeste analizó bien la situación, y en la segunda mitad salió con Renato Tapia ocupando esa posición, con lo que el equipo mejoró notablemente. El Rayo Vallecano renunció prácticamente al ataque durante todo el partido, por lo que se pudo permitir introducir a un mediocentro en esa posición. La salida de balón mejoró notablemente con la presencia del peruano, que en todo caso no acabaría el partido jugando en esa posición, ya que unas molestias físicos provocaron que adelantara su posición al mediocentro, ubicándose como central liberado el brasileño Jailson.
En dos partidos Giráldez ha colocado a cuatro futbolistas en esta posición, y seguramente en las próximas jornadas seguiremos viendo cambios, como el propio preparador reconoció al final del encuentro: “Va a depender del partido, de la capacidad de adaptación a este tipo de juego. ES difícil asumir situaciones de conducción, creo que todos tienen la capacidad y en función del partido y la forma de los jugadores irán cambiando. La idea es que jugase Tapia ahí hasta el final del partido, pero tuvo molestias y preferimos no arriesgar siendo el último hombre”, explicó el técnico celeste.
0 comments:
Publicar un comentario