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| Foto: RC Celta |
Jailson fue uno de los fichajes del Celta en este mercado de invierno. Ante la ausencia de un director deportivo tras el despido de Luís Campos, Rafa Benítez lideró el scouting del club y reclutó a este mediocentro brasileño con el que coincidió durante su estancia en China.
Allí no jugó mucho, y tampoco en las dos últimas temporadas con el Palmeiras, pero el preparador madrileño lo conocía y apostó por él. Su polivalencia, al ser capaz de jugar en el centro del campo y en el eje de la zaga, cubría dos posiciones, una de ellas la del lesionado Aidoo, y además resultó muy económico por lo que era el fichaje perfecto.
No pudo empezar mejor, ya que en su debut marcó un gol jugando como central ante el Amorebieta en la Copa del Rey. Lo que viene a partir de ahí no es tan brillante. Ante Osasuna fue titular e incluso dio una asistencia de gol, la del 0-3 de Douvikas. No hay mucho más que destacar de este futbolista. No se puede decir que no haya cumplido las expectativas, ya que estas no eran muy elevadas.
Ayer informaba Óscar Méndez en Relevo que el Celta abrirá las puertas a Jailson, en caso de que decida volver a Brasil, aunque en el mismo artículo también advierten que esto es algo poco probable. Hasta la fecha no está jugando demasiado, aunque la lesión de Renato Tapia puede ofrecerle la posibilidad de jugar más minutos en los próximos partidos, empezando por el decisivo choque de mañana ante el Almería.
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