El Celta pendiente de Nolito y Augusto

Foto: Adrián Irago

La plantilla del Celta se ha completado con la contratación de Radoja, pero nadie se atreve a darla por cerrada. El club y el cuerpo técnico quedan a expensas del mercado de fichajes, que podría deparar alguna sorpresa antes de que 31 de agosto se cierre el plazo oficial. Los principales candidatos a abandonar Balaídos si llegasen ofertas irrechazables son Nolito y Augusto Fernández. El gaditano insiste en que nada sabe del tema, mientras su agente se pasaba el lunes por Vigo y se reunía con el jugador, antes de que éste se citase con el director general céltico.

Berizzo, ayer, tampoco quiso aventurarse sobre si podrían producirse traspasos de última hora. El técnico da por cerrada la plantilla con Radoja, pero advierte: “Hasta el último minuto del día 31 pueden suceder cosas, pero yo me imagino que no pasarán. No temo que venga alguien y se lleve a Nolito.Si eso pasa tendremos que buscar su reemplazante”. Eso lo dijo en relación a Nolito. Con respecto a Augusto, Berizzo se extendió más: “Augusto viene de estar en un Mundial y los deseos de un futbolista siempre son seguir creciendo. Para nosotros es un jugador muy valioso y necesitamos de su compromiso. Se siente muy a gusto donde está y así me lo ha manifestado. Salvo que llegue algo muy apetecible para él y para el club, no saldrá”.

El entrenador del Celta afirmó en la rueda de prensa en A Madroa que sus dos porteros para la próxima temporada son Sergio Álvarez y Rubén Blanco. “No imaginé ni pedí otro portero, sino no hubiera permitido la marcha de Yoel”, señaló Berizzo.

El técnico se enredó al explicar la situación de Jota Peleteiro, cuya negociación para renovar el contrato está en punto muerto. “Jota vive una situación particular que tiene que ver con su situación personal y sale de una lesión.Esperemos que en un futuro esté apto para jugar al fútbol”. A la pregunta de si se refería a la situación contractual del jugador, Berizzo insistió: “No, no, me refiero a su situación física”.

Respecto a si podrían producirse salidas de jugadores, el técnico proclamó: “No, pero nunca digas nunca jamás”.

Jaime Conde / Faro de Vigo