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| Foto: Ricardo Grobas |
La lesión de Pablo Hernández no ha sido el único problema con el que el preparador céltico ha tenido que lidiar durante la jornada de ayer. El parte de enfermería facilitado por los servicios médicos incluye también a Borja Oubiña, en este caso debido a un problema que no reviste gravedad.
El capitán celeste ha tenido que parar los entrenamientos por causa de una inflamación en el tendón rotuliano de su rodilla izquierda, la más problemática de las dos que se ha lesionado. Se trata de un problema recurrente, derivado de la fuerte carga física que Berizzo está imprimiendo a los entrenamientos en estas primeras semanas de trabajo pero que no revista demasiada importancia. Bastarán algunos días de reposo para que la inflamación remita por sí misma y el futbolista vuelva al trabajo con el grupo.
La buena noticia para el nuevo preparador celeste es que no tardará en recuperar a Hugo Mallo. El lateral marinense se encuentra en la recta final de recuperación de la grave lesión sufrida en el hombro que lo llevó al quirófano a finales de la pasada temporada. Aunque una infección postquirúgica obligó recientemente a una limpieza de la zona afectada que ha retrasado levemente su recuperación, los servicios médicos esperan que el lateral derecho celeste se reincorpore con normalidad al grupo durante la concentración que el Celta inicia mañana en la localidad malagueña de Marbella.
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