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| Foto: Diego Pérez |
La selección danesa de Michael Krohn-Dehli se ha quedado fuera del Mundial de Brasil. Ayer necesitaba una serie de carambolas imposibles, que pasaban por el empate o la victoria de Andorra en Hungría, entre otros resultados, y finalmente el centrocampista céltico se quedó sin la posibilidad de competir en la fase final que se celebrará el próximo verano, en la que podía ser la única y última posibilidad de que el danés disputase un mundial.
Michael Krohn-Dehli debutó con la selección danesa en octubre de 2008, aunque por entonces sus presencias todavía eran irregulares. La selección danesa logró el pase al Mundial de Sudáfrica, y aunque el actual centrocampista celeste estuvo en la lista previa, fue finalmente desestimado, quedándose fuera. Acudió a la Eurocopa de 2012, donde ya gozaba de un protagonismo importante en el combinado danés, de hecho anotó dos goles en la fase final, y prolongó su importancia en la fase clasificatoria para el Mundial de Brasil siendo titular indiscutible en la mayoría de los partidos.
Sin embargo, la eliminación de la "dinamita roja", deja a Krohn-Dehli sin Mundial, lo que a su edad, ha cumplido 30 años el pasado mes de junio, podría significar la última oportunidad de acudir a una cita mundialista. El propio futbolista reflexionaba sobre esta cuestión tras el empate de su selección ante Italia, que dejaba a Dinamarca casi sin opciones. Lo hacía en la prensa danesa y era consciente de que, tal vez, su último tren mundialista había pasado por delante de sus narices.
La próxima cita mundialista, después de Brasil, será en Rusia en 2018. Para entonces Krohn-Dehli tendrá 35 años, tal vez demasiados años para un futbolista que ha demostrado no andar muy fino físicamente. No es una edad descabellada para jugar un mundial, pero hasta el propio futbolista parece tener claro que su mundial era el de Brasil, y que su oportunidad era esta.
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