Las ventajas de que te consideren casi descendido

RICARDO GROBAS

No son pocos los que dan por muerto al Celta. La mayoría de las informaciones en prensa general hablan de las opciones de los equipos para salvarse, dando casi por sentenciado al Celta. La rueda de prensa de Abel no es noticia, lo son las de Manolo Jiménez, Fernando Vázquez, Mendilíbar o Manzano. Son ellos los que aún tienen opciones, y solo falta que se confirme el descenso del Celta para dar la noticia. Nada más. No ha habido conexión en directo con el entrenamiento, ni tan siquiera una reseña. El Celta, queramos o no, es un actor secundario en la lucha por la permanencia. El típico personaje que fallece en el primer cuarto de hora de la película, la primera víctima de Freddy Krueger. 

Es innegable que el Celta es, de todos los equipos implicados, el que peor lo tiene. Es el que menos puntos tiene, visita un estadio complicado ante un rival que le tiene ganas, y podría descender mañana mismo. Esta mañana, en sala de prensa, Abel intentó ver el vaso medio lleno: "Nadie cree en nosotros, así que tenemos mucho que ganar y poco que perder". En cierto modo, el Celta ya no busca la permanencia, sino un ascenso, o un regreso a la categoría que aún no ha perdido. La presión seguramente esté en las piernas de otros equipos que tienen miedo a perder lo que tienen. 

Abel Resino no se contagia de la opinión de los medios nacionales y sigue teniendo esperanza: "Yo si la tengo. He visto cosas muy raras en el fútbol. Mientras tengamos vida, tendremos esperanza. Primero pasa por ganar nosotros mañana, y estoy convencido de que si llegamos a la última jornada con vida tenemos muchas opciones. En los últimos partidos les pueden pesar mucho las piernas a nuestros rivales", explicó el técnico toledano esta mañana en referencia al hecho de que un rival que está "muerto", resucite y les complique la vida. Que los rivales den al Celta casi por descendido puede ser el mejor arma de los de Abel. La receta es ganar en Valladolid y esperar resultados favorables para jugársela el próxima sábado en Balaídos. ¿Por qué no?