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Jonny Castro Otto vivirá este domingo un cumpleaños especial y diferente a todos los que vivió anteriormente. El joven lateral diestro del Celta se encuentra a tres días de celebrar su decimonoveno cumpleaños. Sin embargo, el hecho de jugar al día siguiente en Sevilla supondrá una sensación diferente: "Estar más pendiente y concentrado en el partido que en poder disfrutar de ese día con la familia y amigos", dice.
Recién llegado al fútbol profesional, Jonny confiesa: "No he pasado en años anteriores por una situación similar, a un día de jugar un partido tan importante con mi equipo". El canterano céltico también lo tiene muy claro: "El mejor regalo que puedo recibir es una victoria del Celta en el Sánchez Pizjuán, aunque sea con un día de retraso".
Jonny está viviendo un lindo sueño, porque muchas cosas han pasado en los últimos 12 meses. Del equipo juvenil, tras un brevísimo paso por el filial, ha desembarcado en el primer equipo a causa de la lesión de Hugo Mallo. Y ni siquiera el cambio de técnico parece haber modificado su estatus de titular: "Desde mi debut, siento que he evolucionado en la forma de comportarme sobre el césped. Ahora estoy más concentrado y también más cómodo", comenta.
Optimista
Paco Herrera confió en Jonny y ahora, el testigo lo ha recogido Abel: "Con el míster nuevo no hay queja. Todo me sigue yendo bien y ojalá que nos ayude a lograr la permanencia en Primera. Por mi parte, soy optimista porque apenas contamos con dos puntos menos que el Zaragoza y tenemos pendientes de jugar varios partidos contra rivales directos", señala.
Su mensaje de esperanza lo hace extensible a todo el vestuario: "El que diga que no cree en la salvación del Celta, miente. Todos y cada uno de nosotros confiamos en lograr ese objetivo", apunta.
Con 18 años, Jonny no transmite la sensación de que la banda derecha se encuentre ocupada por un novato: "Siempre me consideré un futbolista muy tranquilo. El hecho de estar jugando y tener continuidad permite que vaya acumulando experiencia, trato de hacerlo bien y en esto tienen mucho que ver mis compañeros. Desde que llegué, me han ayudado muchísimo".
Su confirmación definitiva podría llegar en este marzo al tener que enfrentarse a Madrid y Barça, además de vivir su primer derbi gallego en Riazor. De quien no guarda buenos recuerdos es del osasunista Armenteros: "Todos los rivales que intenté marcar son muy complicados, pero fue quien más difícil me lo puso. Por sus características, es un futbolista complicado de sujetar y más en El Sadar".
En el otro lado de la balanza, evita dar un nombre. "No hay partidos sencillos, ni extremos fáciles de marcar. Esto es Primera división". El lunes jugará por vez primera en Sevilla. Será también el primer partido con 19 años de un Jonny que ha conseguido suplir de forma notable la baja de Hugo Mallo.
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