La ecuación de Quique de Lucas

ANDRÉ TABOADA

La competencia en la banda derecha del Celta es brutal. La llegada de Augusto Fernández achica aún más las opciones en ese puesto para varios jugadores. Si el año pasado De Lucas compitió con Toni Rodríguez, con quién acabó perdiendo la posición, este año se suma a la pugna el internacional argentino Augusto, cuya demarcación ideal es la banda derecha. De Lucas, sin embargo, no se achica, el catalán cree que puede jugar, pero tiene claro que el aumento de la competencia dificulta sus opciones: "Somos más, y al haber la misma demanda de puestos y más oferta, tienes la ecuación hecha". 

Una ecuación en la que también entra Abalo, que tendrá muy pocas opciones. El arousano será la última opción, en el caso de que siga en el equipo. De Lucas tiene claro su rol en el equipo: "Yo solo soy un instrumento y el entrenador utiliza sus instrumentos para realizar su proyecto. Él elige", advirtió. El catalán tampoco se quiere ceñir a un solo puesto y niega que sea un jugador de banda tradicional: "Soy jugador de banda, pero no al uso. He jugado muy poco tiempo pegado a la banda en mi carrera. No tengo ningún miedo a adaptarme a otras posiciones. Manejamos muchas variantes tácticas y muchas opciones para los jugadores. Lo importante es darle las máximas garantías al entrenador", aseguró. 

Y es que las opciones de De Lucas pasan por buscar otras ubicaciones, ya que en la derecha lo tendrá complicado. El catalán puede actuar en la mediapunta, aunque también en la izquierda, y por ahí es por donde pasan sus opciones a día de hoy, mientras no llega el refuerzo para esa banda que ha solicitado Herrera. Pero ojo, De Lucas suele arrancar las temporadas como un auténtico tiro, Herrera lo sabe, y a buen seguro que no lo desperdicia. Por otro lado, el carácter competitivo del catalán es fundamental en cualquier equipo y hacer un buen arranque de competición será clave. Yo no tendría a De Lucas mucho tiempo en el banquillo durante las primeras semanas, pero claro, la ecuación es la que es.