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| ALBERTO LIJÓ |
Varios jugadores del Celta vivieron ayer uno de sus días más especiales al jugar su primer partido en la máxima categoría del fútbol español. Además de Augusto Fernández, que debutaba en la Liga española, pero ya sabe lo que es la élite en su país, jugaron ayer su primer encuentro de Primera División Hugo Mallo, Andrés Túñez, Roberto Lago, Bustos, Álex López, Iago Aspas, Joan Tomás y Toni Rodríguez. Un total de 8 futbolistas, de los catorce que jugaron en el día de ayer, no se habían estrenado en la División de honor del fútbol español.
Fue un debut amargo, como bien comentó Bustos tras el partido, pero a buen seguro que todos ellos se han llevado en el día de hoy una valiosa lección para casa. Todos y cada uno de ellos han aprendido, han mejorado gracias a la exigencia del rival. Salieron de Balaídos siendo mejores futbolistas y ya podrán decir que han jugado en Primera, pase lo que pase de aquí a final de temporada. Seis canteranos y dos llegados de fuera, casos de Bustos y Joan Tomás. El resto, criados en A Madroa, implicados con el club desde hace varios años, y con una ilusión tremenda por seguir muchos años aquí.
Esta temporada servirá para que el gran público los conozca. Para que los espectadores que no están pendientes de Segunda sepan que en Vigo sabemos hacer laterales mientras vean a Hugo Mallo y Roberto Lago. Que reconozcan a ese internacional venezolano que lo fue antes de debutar en Primera, para que conozcan y aprecien la garra de Bustos, el talento de Álex López y Toni o la calidad descomunal de un fuera de serie como Iago Aspas. Y cuando crea que el partido está acabado, saldrá Joan Tomás para marcar un gol decisivo.
El fútbol español ha conocido ayer a ocho grandes futbolistas. Jugadores con talento, juventus y desparpajo. Una mezcla casi perfecta que garantiza el éxito. El fútbol español hoy es un poquito más rico que ayer. Apunten estos nombres, no los olvidarán fácilmente. El futuro es hoy.
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