Entiendo que la situación económica actual obliga a las instituciones públicas a contener el gasto y evitar dispendios superflúos que puedan afectar a sus arcas. El Concello de Vigo no es ajeno a esta problemática a la que nos ha llevado la avaricia enfurecida de la banca, pero hay ciertas tradiciones que no se deben romper. El Trofeo Ciudad de Vigo, que ya ha vivido más de cincuenta ediciones, ha estado a punto de no celebrarse este año. Finalmente, y probablemente con la intermediación del propio Celta se anunció para hoy día 25 de julio la celebración del Torneo con el Atlético de Madrid como invitado.
Ayer se presentó oficialmente el Trofeo y nos encontramos con la sorpresa de que la V que habitualmente se utilizaba como trofeo para el ganador ha sido sustituída por una copa vulgar. Entendemos, insisto, la situación económica, pero, ¿Realmente merece tanto la pena el ahorro para romper con la tradicional copa?. Seguramente sí, o tal vez no, pero ahora mismo me siento desilusionado. Tal vez sea una percepción personal que no trascienda más allá de ese momento en el que ví como posaban los capitanes, representantes del club y del concello con ese sucedáneo de copa, o tal vez la decepción continúe cuando vea que no se le entrega la V al capitán del equipo vencedor. Tal vez mañana se me haya olvidado, no lo sé, pero creo que hay ciertas cosas que no se deben de tocar.
Claro que es mejor esto que lo que hicieron el año pasado. En aquella ocasión tampoco había presupuesto para una copa nueva así que entregaron un trofeo ya usado, que había ganado el Celta anteriormente y que ahora reposa tranquilamente en algún almacén del Estadio El Molinón de Gijón. El problema es que los pillaron, y este año, al menos, van de cara.
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| Las comparaciones son terriblemente odiosas... |
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