Iván Kaviedes, ecuatoriano de nacimiento, ha sido uno de los futbolistas más peculiares que jamás haya vestido la camiseta celeste. Fichado como una estrella en ciernes, militó en Vigo en varias etapas sin llegar a triunfar en ninguna de ellas. Su salida del Celta fue, como su carrera y su vida, digna de un episodio de una teleserie. Tenía que presentarse en el verano de 2003 para iniciar la pretemporada, no lo hizo ni dio señales de vida, y solo se supo de él cuando llamó en septiembre para felicitar al Celta por la clasificación para la Champions y anunciar que no volvería.
Un trotamundos del fútbol, que ha defendido los colores de 16 equipos, que estuvo en dos etapas en el Celta y en el Puebla mexicano, y que defendió los colores del Barcelona de Ecuador en cuatro etapas diferentes. Jugó la liga ecuatoreña, la italiana, la española, la mexicana, la portuguesa, la inglesa y la argentina, sin acabar de triunfar en ningún equipo, y su periodo más largo en un club ocurrió entre 1995 y 1998 en el Emelec, su club de debut a nivel profesional.
Seguramente muchos os preguntaréis que fué de Kaviedes. Pues bien, el delantero ecuatoreño anunció recientemente que no jugaría más a nivel profesional al sentirse decepcionado con el fútbol, aunque unas semanas después firmó con el Aucas, de la segunda división ecuatoreña, donde juega actualmente. En su equipo anterior, Deportivo Quito, le fue rescindido el contrato por problemas disciplinarios y ahora quema sus últimos cartuchos en el fútbol, cerca de cumplir los 35, intentando el ascenso a la máxima categoría del fútbol de su país en el Aucas. Genio y figura el "Inseminador".
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