El Celta ha hecho uno de los mayores ridículos que se recuerdan en Balaídos ante un Girona, que aprovechó la dejadez del Celta en ataque y la inutilidad, una vez más, de la zaga celtiña que demostró hoy ser una de las peores de la categoría. Pudieron ser más a poco que los gerundenses hubiesen querido, pero se conformaron con marcar 4 y contemporizar el resto del partido.
De entrada, Herrera apostó por el equipo que dejó buenas sensaciones en la segunda parte de Las Palmas, con Bustos como único pivote de destrucción, y con Álex López, Trashorras y Michu por delante. El experimento, que en Las Palmas dio buenos resultados, como ya los había dado en otros partidos, falló desde el principio. El Girona tenía claro a qué venía a Vigo ycómo hacerlo.
En los cinco primeros minutos gozó de tres ocasiones claras, aprovechando la última gracias a una serie de despropósitos de la zaga celtiña que permitió un disparo al palo y no había nadie para tapar el rechace, lo que aprovechó Despotovic para batir a Yoel.
Tras el gol, el Girona se relajó, retrasó ligeramente la defensa y se dedicó a esperar a un Celta, bastante espeso y que llegaba arriba por arreones. Hoy no era el día, pero la historia pudo haber sido diferente si el Celta aprovecha sus mejores minutos en el partido, que acontecieron entre el minuto 15 y el segundo gol del Girona. Una jugada enorme de De Lucas, que se fue de varios jugadores pegado a la línea de fondo y dejó un balón de oro a David que éste falló incomprensiblemente. El propio David volvió a tener el gol en sus botas tras un gran robo de Michu que se la deja al toledano, quién tras una buena jugada se planta solo ante Santamaría, al que no puede batir.
Ahí se acabó todo el potencial ofensivo del Celta en la primera parte y casi en el partido, y de hecho, la historia del partido se acabaría con los dos siguiente goles del Girona, otra vez por fallos defensivos del Celta que no desaprovechó, primero Luso, y después Despotovic, a quién Vila y compañía han hecho internacional en la tarde de hoy.
Sin mucho más, salvo algún ridículo aislado de nuestra zaga, se llegó al descanso con un claro y justo 0-3 a favor de los catalanes.
En la reanudación, más de lo mismo. El Celta pareció salir con más brio, algo que le duró 5 minutos. Siendo justos, duró 8 minutos, el tiempo que tardó Murillo en ser regateado por Chechu y su centro, raso y sin mucho peligro, le llega a Despotovic que remacha a Yoel. Al jugador del Girona solo le faltó abrazarse y celebrarlo con nuestra defensa.
El partido estaba muerto y Herrera decidió sacar del campo a Michu y a Trashorras para dar entrada a Iago Aspas y Joan Tomás. Poco o nada aportaron, aunque sí le dieron un poco de de frescura y velocidad al juego, que no fue suficiente para inquietar a Santamaría. Quiero hacer un pequeño inciso con Santamaría, el portero del Girona, que se dedicó a perder tiempo y fingir lesiones con un 0-4 en el marcador. Ni era necesario ni procedente esa teatralidad.
Volviendo al partido, en la segunda parte hubo dos ocasiones para el Celta, (en días como hoy es fácil contarlas, una gozada), la primera a pies de De Lucas, tras una buena maniobra su disparo fue repelido por Santamaría, y otra de Joan Tomás, que no supo controlar un balón relativamente fácil cuando se quedaba sólo en área pequeña.
Y nada más. Un partido muy triste, donde al celtismo no le quedaron fuerzas ni para silbar y donde lo más destacado fue el regreso de Noguerol, a quién Raúl Agné premió con la oportunidad de jugar ante su equipo y recibir una más que merecida ovación por parte de una afición que no le olvida. Pensar que a Noguerol no se le renovó porque no tenía calidad viendo los centrales que tiene este equipo da bastante miedo.
Hoy todo se ve complicado. Este equipo está en tercera posición por méritos propios, pero podemos cargarnos toda una temporada de trabajo. Si el Cartagena derrota a la Ponferradina se pondría a 6 puntos del Celta, así que aún habrá que sufrir, no para quedar terceros, sino para al menos quedar sextos. Algo que no está muy claro. Desde luego, hay mucho que mejorar, y lo peor de todo es que la confección de la plantilla invita a pensar que será dificil hacerlo de aquí a junio.
FICHA TÉCNICA
Celta: Yoel, Hugo Mallo, Jonathan Vila, Catalá, Murillo, Bustois, Álex López, Michu (Iago Aspas, min.53), Trashorras (Joan Tomás, min.53), De Lucas y David (Dani Abalo, min.62)
Girona: Santamaría, Luso (Noguerol, min.79), Serra, Migue, Bautista, Chechu, Tébar, Dorca, Moha, Ángel (Jandro, min.75) y Despotovic (Peragón, min.65).
Goles: 0-1, min.5: Despotovic; 0-2, min.25: Luso; 0-3, min31: Despotivic; 0-4, min .53: Despotovic
Árbitro: Melero López, del comité andaluz. Amonestó a Hugo Mallo, Catalá, Ángel
Campo: Estadio de Balaídos, 9.211 fenómenos.
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