Liga Indoor: Celta 7-7 Valladolid - Los cuartos de final deben esperar

El Celta completó el ramillete de resultados en sus tres primeras apariciones en la Liga de Fútbol Indoor. Ayer empató ante el Valladolid (7-7), después de estrenarse con una derrota ante el Deportivo y de alcanzar su primer triunfo con posterioridad ante el Oviedo. El resultado alcanzado ayer deja en el aire la clasificación del quinteto que dirige Moncho Carnero para los cuartos de final. A los vigueses les queda otra oportunidad, ante el Sporting de Gijón, que se disputará en Sanxenxo.

Tras ganar a los ovetenses, los célticos se presentaron ayer en As Travesas con la ilusión de sumar otra nueva victoria, pero enfrente se encontraron con un rival corajudo y con muchos recursos, que aprovechó los fallos del contrario para dominar durante buena parte de la hora de juego.
Tras un mal inicio, los célticos se repusieron y con Manel como máximo artillero (sumó tres tantos) se fueron al descanso con ventaja en el marcador (5-4). Ratkovic y Bajcetic también contribuyeron a frenar a los vallisoletanos, que explotaron la verticalidad de Pereira y de Chuchi Macón.

En la segunda mitad bajó la efectividad de los rematadores, a pesar de que el juego entró en una fase electrizante, peleándose cada balón con uñas y dientes. El cansancio pasó factura y relucieron los fallos. Con el 6-5 a favor de los celestes, a falta de doce minutos para el final, parecía que la victoria se quedaría en casa. Los locales, además, contaban con la presión de un pabellón entregado a la causa.

Pero volvieron a surgir Pereira y Chuchi Macón para darle la vuelta al marcador. Éste aprovechó una indecisión de Fran Caínzos para superar a Emilio. Eran los últimos instantes. Parecía que todo estaba perdido para los de Carnero. Pero Caínzos tiró de genio y figura, se lanzó al ataque, controló el balón y fusiló a Rodri. Arregló el entuerto y abrió la puerta a que el Celta pueda pelear con el Sporting por la clasificación para los cuartos de final.